top of page
Buscar

¡Hazlo!

  • Foto del escritor: Ximena Martinez
    Ximena Martinez
  • 28 jul 2020
  • 3 Min. de lectura

Inicio este escrito con un sincero agradecimiento porque nuevamente tengo la posibilidad de estar frente a esta computadora haciendo catarsis; escribiendo estas líneas para toda aquella persona que pueda leerme, pero sobre todo, porque estoy haciendo lo que más me gusta, lo que más disfruto, que es escribir.


Siempre he pensado que no hay mayor triunfo en la vida que amar lo que haces, sea lo que sea, seas profesionista, seas empleado, seas vendedor, hagas lo que hagas que te produzca felicidad. Algunas campañas publicitarias con sus estereotipados estilos de vida nos han hecho creer que tener éxito es igual a tener dinero o tener una vida llena de lujos o que el éxito está relacionado con un cuerpo, una belleza, una edad.


Por eso medimos el valor de las cosas en pesos, en marcas. Nos hemos vueltos consumistas sin mucho sentido, comprar por comprar, porque está de moda, porque es el modelo más reciente, porque todo mundo tiene uno.

Habrá quienes asumen esta postura porque económicamente pueden, habrá otros que tengan que limitarse. Cada situación es válida, como ese estilo de vida, sin embargo estamos al filo de nunca estar conformes, plenos y totalmente satisfechos, siempre querremos más.


Si cada persona entendiera que el éxito también puede ser igual a dedicarte a lo que más te gusta y que te paguen por hacerlo; o que el éxito a lo mejor es tener una familia; que el éxito puede llegar con sutiles decisiones cada día. Entonces habría personas tal vez más felices, más conscientes, más prosperas, más dispuestas a hacer algo por su vida.


Sé que cada persona es libre de elegir cómo gastar tanto su tiempo como su dinero. Sin embargo veamos más allá de la cultura superficial y comercial en la que nos hemos desarrollado, si bien es cierto que este 2020 nos trajo consigo grandes cambios en nuestra habitual forma de vida, algunos lograron darse el tiempo necesario para detenerse y reflexionar, otros adquirieron nuevos hábitos, otros comenzaron a valorar su salud, etc.


Siempre lo he dicho, cada quien tuvo un aprendizaje de esta situación. Ahora que nos estamos replanteando la nueva forma de vida, es momento también de enfocarnos en ese éxito que queremos obtener.


Esas sutiles decisiones que tomamos cada día, hacen la diferencia. Pregúntate constantemente -¿Qué es lo que quieres? Aquello que realmente te haga sentirte bien, motivado lo suficiente para seguir a pesar de que las situaciones se tornen complicadas. Recuerda: siempre habrá un problema, tienes que ser realista. Siempre habrá un “no”, una discusión, una ruptura, un impedimento. Aquí lo que realmente te levantará es a dónde quieres llegar, con quien y como lo quieres.


No te voy hablar de positividad toxica, ni de amor propio, ni te voy a pintar un mundo color de rosa, ni dar por hecho una verdad absoluta porque cada quien tiene un punto de vista diferente. Para cada blanco, hay un negro, para cada mal, hay un bien, para cada subida existe una bajada, es un equilibrio que no podemos cambiar, porque hasta incluso nosotros también somos equilibrio, estamos hechos de luz y sombra al mismo tiempo.


El éxito que buscas incluso, puedes ya tenerlo. Y si no es así, entonces búscalo. Si quieres dinero, tienes que trabajar, si quieres amor, amate primero, si quieres estabilidad, busca ayuda, quieres un negocio, busca una asesoría, sea cual sea la razón simplemente hazlo y acepta el equilibrio de la vida, aunque a veces sea difícil de comprender.


Esta contingencia permitió que le diéramos crédito al tiempo. Al tiempo que podemos invertir en nosotros, como en el tiempo que también podemos aparentemente perder cuando no hacemos nada. Ahora que pareciera tenemos una segunda oportunidad, hagamos de nuestro tiempo lo que responsablemente se llama “vivir”. Vivir con miedos, con tristezas, vivir con triunfos, con derrotas, con alegrías, con corajes, vivir con el éxito que solamente tú elijas.


Y así viviendo entre escritos, te comparto esta reflexión que llego a mí, en los días caóticos que cualquier ser humano puede tener, pero que no por ello no se aprende algo. Y así mismo te doy las gracias por darte el tiempo de leer esto, que para mi, ya es un éxito.

Nos vemos la próxima semana.


Foto de Donald Tong en Pexels


 
 
 

Comments


© 2023 by Name of Site. Proudly created with Wix.com

bottom of page